23 may 2015

Ultimo sueño, el eterno

Capitulé sueños al despertar,
sueños de un sueño eléctrico.
Alcancé soñar mortajas de abedules despidiéndose de ese otro sueño nocturno;
sueños de un sueño ilimitado, trascendido en columnas de un vapor material.

Al despertar he oído disparos,
de una noche anterior, bajo un noctambulismo genérico;
al despertar he sido un durmiente soñando surrealidades pretéritas y disonantes.

Creo, o creía, advertir esos límites, esas advenedizas fronteras de mares carbonizados,
pero he creído estar despierto cuando soñar ha sido constante fisonomía de un rostro irreflejable.
Y ya, durante los amaneceres, escalo recuerdos sobre la cima de desatadas montañas,
y clareo, clarean soles despidiéndose de mis vigilias.  

15 may 2015

Viento

Viento que vuela invisible sin percances arrastrará sonambúlicas desesperanzas de aturdidos meridianos. Será el Dios, será su profeta acobardando marchas en contra de poderíos analíticos señoreando patíbulos sin rostro.
Viento que volaba, que arrasaba, que incitaba quemar entre dientes carbónicos había sido aire soplado desde los inicios anfitriales. Recordaba pertenecer, tener un origen y sabía dónde hallarlo. Pero hacía dolencias, hacía desprevenidos enfados reconocerlo mediato. Hacía, hacía y deshacía su volar sobre dorsales de pieles sin nombre.
Viento que vuela es visiblemente acatado por despiertas esperanzas de auditas disonancias. Será pavor, será un hereje marchando triunfal hasta la gota de los quemares. Será su incendiar su brisa espasmódica mientras abran sus alas un hechizo consagrado.