27 ago 2010

Ángel "el cojo"

Era aquel un personaje espectral. Parecía surgido de las mismas entrañas del Averno. Todas las partes de su cuerpo que la ropa dejaba al descubierto eran pústulas abiertas...
Ángel, el cojo, llevaba con cierta gracia el Misalito Regina, libro de reflexión con tapas de nácar blancas. Lo portaba en una mano a modo de hisopo, mientras con la otra cogía el aparato ortopédico que le permitía el desplazamiento, haciendo las veces de tercera pierna incorporada al juego con el que nació. Lo usaba porque la pierna que iba en el lado de aquella especie de prótesis, colgaba como un badajo, inerte, a unos veinte centímetros del suelo, especie de balancín siniestro, que lo mismo apuntaba a diestra que a la siniestra.
Después he sabido que se dedicó a rufián, regentando un lupanar...

26 ago 2010

Laberintos

Los afluentes del lago desestimaban, enceguecían.
Mientras conocía esta discordia, solía detenerme para ver las aves, el bosque, el lago y sus ríos. Mientras recorría este páramo donde estaba, lo veía; este paisaje de tremendez sólita. Mientras lo sabía:
cuando los había conocido el primer día, no parecían adentro de un laberinto como después. Cuando los sabía libres cuando los veía cuando apenas los reconocía sin diques. Cuando los sabía, mientras:
cuando lo sabré:
cuando diques reconocerán cuando verán sin libertad el recorrido sabido. Cuando un laberinto por tenerlos adentro cuando ese primer día los conocerán.
Mientras lo sabré:
mientras ese paisaje será visto mientras las aves podrán detenerme mientras esa discordia se conocerá.
El laberinto de diques y montañas desestimará, enceguecerá.

19 ago 2010

Recta



Amplía su esbeltez la recta con estiramientos; con enhiestos andamientos estos estirares se prolongan hacia diversas perspectivas. Y se reanima, y se vuelve distendida hasta que estirada parte hacia las explicaciones sobre ésta existiendo.
Sobre esos puntos; sobre esas interpretaciones, se dirige hacia un confín, hacia un límite donde saberse término. Punto e interpretación debajo allanan la base para darse con liberalidad; punto de fuga e interpretaciones discursivas clamando ubicaciones. Sobre y debajo, delante, adelante y atrás, son significantes espacios donde poder escribir los variables sentidos. Aunque varíen, suelo comprenderlos desde una recta devenir; pero no, nunca hacia dónde ir. Y la sé, la reconozco y la advierto mientras percibo ante ésta la oriundez de su estrechez. De su origen, de su primera cualidad.
Puntos e interpretaciones sobre estas contemplaciones harán exploraciones. Harán, detenidas y concisas, todas partes y todas argumentaciones hasta deshacerlas. Harán lo que jamás habrá, tal vez, por el inicial motivo de sus apariciones: una recta flexible.

Fondo principio

                 

Detrás de su predominio, el primer plano solía insignificarme. Por haber sido cuestión de posiciones; por haber sido regla de elementos, sufrían sus versátiles posiciones incertidumbres. Sufría contra sufrimientos contra sufrires las últimas voces ante el conocimiento del fondo, último plano.
Principios delante, fondo detrás, resultaban escazas las visiones que pudiesen revelarme cuál había sido el plano principal, principio incuestionable donde quitar algunas dudas ante mi visión indetenible.
Principios delante, merman sus clamores cuando del fondo se menciona, se conocen, se explican diversas estrategias hasta dilatar los bordes hasta presenciar otras primeras figuraciones donde observar.
Fondo detrás, acallan tus voces mientras veo anticiparse la presagiosa marcha de siluetas ubicándose sobre vos, sobre ese fondo, ese último plano sabiéndolo figura y fondo siendo un mismo marco, una misma variación idearia imaginariamente fértil.
Principios adelante y atrás de fondos ante márgenes -a veces- delgados, podrán ser olvidados, siquiera frente a una misma respuesta de prioridades que podrá decidirlos sin anticipaciones ni tardanzas, sin presente ni recuerdos sobre un blando y tibio futuro conduciéndolo siempre alejándose hacia la mimetización hasta la conclusión, única y experta de un cuadro.
Podrá ser quizá el ultimo que vea y veré, esos principios de un dibujo sobre ese fondo siempre hegemónicamente lindante a tergiversaciones cayendo sobre el interrogante. Preguntas que son argumentos de un libro sin bibliotecas que puedan abarcarlo.
Aunque podrá quizás conocerme como lo conozco hasta que sepa que detrás de figuras habrá un fondo propiciando el último resultado. Primer discurso que hasta debatirlo y proponerlo confiará en demostrarlo fondo siempre dispuesto, explicándose inicio donde se ubicarán figuras veloces significativamente.

14 ago 2010

13 ago 2010

Triángulo



Triangulares condiciones arbitraron en la querencia de uno, de una forma triangular donde reconocerse. Incidieron con azules haciendo de este tinte, una tintura de oscuridad corpuscular.
Tres segmentos y tres puntos varían sobre límites, donde sin curvatura posible, se agrupa la constitución. Y lo hacen, lo elaboran hasta depararle forma de punta; razones geométricas para retribuirse el influjo de azules de un único azul temperamental.
Tres segmentos y tres puntos variaban sobre esos límites con inhóspitas curvas. Y lo hacían, lo elaboraban deparándoles formas de puntas que tras haber escogido esa insinuante forma, entre azules perdía aquel carácter impetuoso.
Tres segmentos y tres puntos varían, modifican, allanan y ocultan las formas donde son rectas incapaces de ser bajo otra demanda. Porque la instauración del azul lo hace rígido. Lo compromete firme composición, tenue divague y aflujos sin incidencia alguna. Y se queda, pertenece ese color a esa formación.
Triangular firmeza contiene –relativamente- posibilidades donde estancar el único azul desde azules influyendo hasta limitarse.

11 ago 2010

La chinche ocultó el sol


Fue una que cohabitó con la savia mustia de incoloros vértices perpendiculares parafraseando el negro refulgir de tensos tallos que sepultaban el prado asediado por relámpagos de papel junto a la orilla fangosa una piel añeja diluvió propenso a menoscabos incongruentes la mano con desmanes apócrifos desdeñando palpitar sinnúmeros boquiabiertos que menguaron estrecheces pero pervivió el insecto desde el sólito ángulo eclipsó tendiendo vejámenes petulantes de algunos que coincidieron y percibieron y reanudaron la rueda mortal otrora colorida con capullos presurosos por sus néctares ambiguos pero ofrecidos al torrente insecticida de brusquedades permanentes inherentes volviendo de la tregua reincidió la astral desaparición